El
señor Oscar Ryan, administrador y propietario del blog Mi pequeña biblioteca, ha creado un nuevo premio bloguero.
«¿Y
por qué llamo señor al bueno de Oscar?»,
preguntaréis alguno. Os lo diré.
Primero: ¿Habéis visto las fotos de su perfil en Google Plus? Hacedlo, por
favor. Es pura elegancia. Y estilo. Encima en todas las fotos de su
perfil luce traje impecable y corbata, e, incluso, sombrero de ala
ancha.
Segundo:
Precisamente en una de esas fotos, se le ve posando junto a la
estrella de “La voz”, es decir, el único e inigualable Frank
Sinatra. Así que un respeto, por favor.
Y
tercero: ¿Por qué no puedo llamarle señor? ¿Acaso os ha hecho
algo el hombre? Pues eso.
El
premio creado por Oscar se llama Reconocimientos Ahínco, y, según
palabras de su creador, su finalidad es la de testimoniar que el
autor del blog premiado se dedica con ardor al trabajo de creación
literaria.
Según
sus propias palabras, Oscar define de esta manera el porqué del
citado nombre: «Decidí
denominarlo Reconocimientos
Ahínco,
debido a que “Ahínco” me parece una bonita palabra en nuestra
lengua para describir las ganas y el esfuerzo. También quería huir
de nombres tan comunes en este tipo de premios tipo “Brown Tiger”
“Best Writer” “The one and only”…Etc.».
La
ganadora de la primera edición de este premio ha resultado ser María
Campra Peláez,
más conocida en la comunidad bloguera de Relatos
Extraordinarios
como ESCRITORA MAMÁ,
que, aparte de su nombre artístico, es el nombre del blog que ella
misma administra.
Y
entre los cinco nominados por ella, María ha tenido a bien premiar a
este blog y, por extensión, a quien esto os escribe. Así pues:
¡gracias, María! : )
Entre
las normas de aceptación del premio, se encuentran las siguientes
cláusulas:
—Agradecer
públicamente a la persona que te ha nominado.
—Nominar
a cinco blogueros que reúnan las condiciones citadas en la
descripción del premio.
—Notificar
a tus nominados.
—Situar
el logo en tu blog.
—Explicar
por qué sientes la necesidad de compartir tus escritos.
Y
éstos son mis nominados y/o premiados (como siempre, lo hago por
orden alfabético):
Como
ella misma se define en su blog, María es una «mujer
sensible y pensante, esposa y madre, del siglo XXI».
Apasionada de la literatura, María cultiva casi todos los géneros
literarios: desde la poesía hasta los cuentos y relatos. Y lo hace muy bien, además.
Ragnar
—cuyo nombre de pila no diré para no desvelar al librero que se
esconde tras semejante seudónimo—, debe su nombre a un rey vikingo
que reinó en el siglo IX. Ignoro si su espíritu anida en nuestro
querido librero. Pero yo, por si acaso, seguiré tratándolo con
reverencial respeto, no vaya a ser que le dé por liderar a una horda
de los suyos contra mi blog y lo acabe arrasando todo a su paso.
A
Ragnar lo que mejor se le da es el micro y el relato breve. Supongo
que como buen librero que es, procura respetar al máximo esa vieja
sentencia de Baltasar Gracián que reza: «Lo
bueno, si breve, dos veces bueno».
De
Luís Mariano hay dos cosas que me acojonan un poco. La primera, que
algunas de las cosas que escribe me suelen inquietar bastante, ya que
le gusta escarbar en los aspectos psicológicos del ser humano, y no
siempre para dejarlo en buen lugar. Y la segunda, que entre sus
habilidades se encuentran la de leer la mente. ¿A que acojona? Uff.
Dotada
de un sentido del humor y una ironía que despliega en la mayoría de
sus textos, Soledad se ha ganado en muy poco tiempo el aprecio y el
reconocimiento de muchos blogueros que ven en sus letras un aire
fresco y divertido. A propósito, ¿puedo hablar de mi libro, Sole? ;
)
Al
bueno de Edgar le encanta escribir sobre el lado más oscuro de la
condición humana. No sé si el trabajar en un hospital le influye en
ello o no, aunque sí que puedo decir que para nada se corresponde lo
que escribe con la imagen que tengo de él: un tipo atento, cercano,
apasionado y locamente enamorado de su familia, a la que adora.
Enhorabuena
a los premiados.
Ah,
se me olvidaba. Uno de los requisitos de aceptación del premio
consistía en responder a la siguiente pregunta: ¿Por
qué sientes la necesidad de compartir tus escritos? Pues allá va:
«Lo
diré abiertamente y sin tapujos: me veo obligado a compartir mis
escritos por mi blog, que insiste en ello. No queráis saber lo
pesado que se pone a veces. Menudo pieza mi blog. Todo un personaje,
ya os lo digo yo”.
Bueno,
os dejo que tengo que acomodar el premio en mi estantería.
Un
abrazo.